Israel arremete contra el alto representante para Política Exterior de la UE, Josep Borrell, por su posición sobre el conflicto en Gaza. La diplomacia israelí ha decidido que no va a considerarlo más un interlocutor válido del bloque europeo en el conflicto sobre Oriente Próximo porque “se ha situado en el lado palestino”. Tampoco aceptará el plan de paz que busca promover, con ayuda de la comunidad internacional, una solución de dos Estados en Israel y Palestina. Esa enérgica reacción se produce apenas 24 horas después de que Borrell defendiera ante los ministros de Exteriores de los 27 Estados miembros una iniciativa para poner freno a la destrucción en la franja de Gaza.
“Israel ha perdido la confianza” en Borrell y “no lo considera un interlocutor equilibrado de la UE”, han adelantado fuentes oficiales israelíes a EL PAÍS. Las autoridades de ese país rechazan el plan de 12 puntos presentado el lunes por el jefe de la diplomacia europea y debatido con los ministros. El proyecto prevé la celebración lo antes posible de una conferencia “preparatoria” de paz y conversaciones paralelas con las partes dispuestas a negociar hasta que sea posible que los dos principales interlocutores se sienten a la mesa y acuerden una solución. De acuerdo con la hoja de ruta esbozada, esta debe pasar, indefectiblemente, por la creación de un Estado palestino viable junto al israelí.
Según las fuentes consultadas, la gota que ha colmado el vaso la actitud de Borrell ante el ministro israelí de Exteriores, Israel Katz, durante el Consejo de Asuntos Exteriores celebrado en Bruselas el lunes. Allí, el alto representante (y una parte considerable de los ministros europeos) mostraron sorpresa por los vídeos aportados durante el debate, bastante alejados del foco de discusión, que era la destrucción en Gaza. Pero Borrell llevaba ya varias semanas irritando cada vez más a Israel.
El Gobierno de Benjamín Netanyahu había callado hasta ahora, pero ha ido tomando rigurosamente nota de lo que considera una cada vez mayor salida de tono del jefe de la diplomacia europea. La indignación fue creciendo como mínimo desde su llamamiento a “imponer” desde fuera una solución de paz en la región, como dijo a comienzos de año en Lisboa, hasta sus controvertidas declaraciones el viernes en Valladolid, cuando acusó a Israel de haber financiado a Hamás. Según las fuentes consultadas, eran declaraciones del primer ministro Netanyahu sacadas fuera de contexto. “Hamás fue financiado por el Gobierno de Israel en un intento de debilitar a la Autoridad Palestina liderada por Fatah [organización política fundada por el exlíder palestino Yaser Arafat en 1958, 10 años después de la independencia israelí]”, dijo Borrell tras ser nombrado doctor honoris causa por la Universidad de Valladolid.
Pero el elemento que más ha irritado a Israel ha sido el tono irónico del alto representante tras la reunión de ministros de Exteriores en Bruselas. Lo utilizó al comentar, en rueda de prensa, la decisión del jefe de la diplomacia israelí, Israel Katz, de mostrar dos vídeos, uno sobre el proyecto de una isla artificial frente a Gaza y otro de una conexión ferroviaria. Según las palabras de Borrell, ambas grabaciones “tenían poco o nada que ver” con la cuestión que se estaba discutiendo, las medidas para aliviar el conflicto.
“Creo que el ministro hubiera podido aprovechar mejor su tiempo para preocuparse por la seguridad de su país y por el elevado número de muertos en Gaza”, deslizó Borrell ante los periodistas. Las fuentes diplomáticas consultadas por este diario admiten que la decisión de Katz de mostrar estos dos proyectos de largo recorrido mientras los ministros europeos le urgían a aliviar la grave situación humanitaria de la población palestina en Gaza provocó cuanto menos sorpresa en varios de los presentes. Pese a todo, la diplomacia de Israel alega que Borrell conocía la intención de Katz de hacer esa presentación y considera que su actitud no se corresponde con la disposición del ministro israelí de Exteriores de acudir a la cita en Bruselas. A la capital belga viajaron también el ministro de Exteriores palestino, Riyad Al Maliki, y sus pares de Egipto, Jordania y Arabia Saudí, así como el secretario general de la Liga Árabe, Ahmed Aboul Gheit.
Únete a EL PAÍS para seguir toda la actualidad y leer sin límites.
Suscríbete
En declaraciones este martes, antes de conocerse la reacción israelí, Borrell volvió a defender la solución de dos Estados y afirmó que Israel no puede tener “derecho de veto” sobre la creación de un Estado palestino. Si algo quedó claro de la cita ministerial del lunes, agregó, es que hay que “seguir hablando y discutiendo” para “encontrar formas de que se implemente una solución”.
El alto representante “ha ido demasiado lejos y se ha situado en uno de los lados, el palestino”, sostiene Israel, para el que, por este motivo, “ya no representa la línea de la UE en el conflicto en Oriente Próximo”. Como resultado, agregan las fuentes, Israel “no considerará su plan de paz como fiable y seguirá trabajando para promover la colaboración con la UE a través de otros interlocutores”. Pese a los posicionamientos diversos de los Veintisiete ante el conflicto actual y la actuación de Israel, como se ha visto en los votos ante Naciones Unidas sobre las resoluciones pidiendo un alto el fuego, la posición de dos Estados como única solución viable y duradera, que rechaza el actual Gobierno israelí, es compartida por el bloque.
Pese a ello, subrayan las fuentes sin agregar más detalles, “Israel mantendrá sus buenas relaciones con la UE”.
Frente a la actitud de Borrell, en Israel se ha apreciado sobremanera la iniciativa —muy controvertida en Bruselas—de la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, que viajó junto a la presidenta de la Eurocámara, Roberta Metsola, rápidamente al país tras el ataque terrorista de Hamás el 7 de octubre. La alemana mantuvo, sobre todo en los primeros días del conflicto, una posición considerada demasiado escorada hacia Israel —“Israel tiene derecho a defenderse”, declaró junto a Netanyahu— que solo matizó tras críticas de socios comunitarios que le reclamaban que exigiera abiertamente el respeto al derecho internacional en la respuesta militar desplegada en Gaza.
Sigue toda la información internacional en Facebook y X, o en nuestra newsletter semanal.
Suscríbete para seguir leyendo
Lee sin límites
_