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Xavi: “Nos ha salido el peor partido de todos” | Fútbol | Deportes

El Barça buscó el clic en el primer título de la temporada y primer clásico de 2024 en la reedición de la final de la Supercopa del año pasado. Xavi Hernández quería revivir el ADN Barça y cruyffista: “La idea es intentar ser protagonista con balón. No perderla y dominar. Les he dicho que disfruten, porque hay cosas que no vuelven”, aseguró el técnico azulgrana antes del encuentro. Y a pesar de tener la posesión como pedía, la defensa azulgrana se desvaneció ante los ataques del conjunto blanco en el que era el primer título perdido para Xavi esta temporada: Jules Koundé regaló el primer gol a Vinicius, Ronald Araujo —confundido y expulsado por dos amarillas— dejó el penalti en bandeja al Real Madrid y Alejandro Balde —completamente fuera del partido— sumó 13 pérdidas de 34 a media parte, además de no sumar ninguna ocasión.

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Andriy Lunin, Ferland Mendy, Nacho, Dani Carvajal, Rüdiger, Aurelien Tchouameni, Federico Valverde (Dani Ceballos, min. 86), Jude Bellingham (Joselu, min. 85), Kroos (Modric, min. 81), Vinicius Junior (Camavinga, min. 81) y Rodrygo (Brahim Diaz, min. 76)

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Barcelona

Iñaki Peña, Koundé, Ronald Araújo, Alex Balde, A. Christensen, Ferrán Torres (João Félix, min. 61), Pedri (Lamine Yamal, min. 61), Gündogan, Sergi Roberto (Fermín López, min. 61), Frenkie De Jong y Lewandowski

Goles 1-0 min. 7: Vinicius Junior. 2-0 min. 10: Vinicius Junior. 2-1 min. 32: Lewandowski. 3-1 min. 38: Vinicius Junior. 4-1 min. 63: Rodrygo.

Árbitro Juan Martínez Munuera

Tarjetas amarillas Ronald Araújo (min. 36), Sergi Roberto (min. 39), Jude Bellingham (min. 42) y Rüdiger (min. 62)

“Teníamos mucha esperanza y nos ha salido el peor partidos. No hemos estado cómodos”, explicó Xavi Hernández tras la derrota. Y se disculpó: “Pedimos perdón a los aficionados. El Barça volverá. Esta no es la imagen que tiene que dar el Barcelona en una final”, destacó el técnico. Ninguno de los últimos 12 clásicos llegó al descanso en empate. Y este no fue diferente. “Queríamos ganar. Los dos goles en 10 minutos han hecho mucho daño. Nos vamos jodidos. Confío plenamente en este equipo, saldremos de esta. Ahora a hacer autocrítica”, aseguró Sergi Roberto tras el encuentro. “Hemos estado muy mal en defensa y en presión. No puedes empezar una final 2-0. Y tampoco hemos hecho una buena segunda parte. Nos ha faltado de todo”, argumentó Xavi.

Los goles no tardaron en llegar entre imprecisiones y pérdidas de Balde y descoordinación de la pasiva defensa. Sobre las cabezas de la zaga azulgrana sobrevoló el balón antes del cuarto gol del Madrid. Christensen, fuera de sitio, se dedicó a aguantar a Valverde, Vinicius superó a Araujo sin despeinarse y Koundé, en el centro del área, tan solo miró cómo el balón entraba a la portería de Iñaki Peña. El guardameta azulgrana no salió bajo los palos durante el partido, y tan solo pudo dedicarse a tratar de remediar, sin éxito, los errores continuos de la zaga.

Y cuando parecía que la defensa no podía cojear más, el capitán del Barça se empujó a su propia expulsión: Araujo vió la segunda amarilla a 20 minutos del final y el equipo de Xavi se quedó con diez jugadores, obligando a Frenkie de Jong a ocupar la posición de central. Sin presión, el equipo se dedicó a observar cómo la pelota rodaba. En ataque, tampoco el Barcelona brillaba. Inofensivos, tan solo el gol de Lewandowski —su diana número 12 y su tercer partido consecutivo anotando— hizo que el marcador azulgrana se moviese.

El Barça suma dos partidos —el otro fue contra el Girona— con cuatro goles encajados durante este curso, y 33 dianas en contra esta temporada. Sin organización, sin fuerzas al final del partido, sin tiempo añadido al cumplir los 90 minutos, el equipo de Xavi se olvidó del soñado resultado de la final de la Supercopa de 2023. “El partido ideal”, describió el técnico refiriéndose a aquel encuentro la temporada pasada. Pero el resultado y el juego nada tenían que ver con aquella victoria. “Felicito al Madrid, ha sido justo vencedor”, concluyó Xavi, sin perder la esperanza: “Es un título perdido, pero sigo creyendo en el proyecto”.

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By Adrian Cruz

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